En 2021 el Gobierno Federal de MORENA decidió inundar Tula para desfogar las presas, decisión duramente cuestionada puesto que, según los expertos, representó una irresponsabilidad total de las autoridades.
Durante esas semanas, sin avisar a la población, ni evacuar, las autoridades en Ciudad de México improvisaron un deshago de presas cercanas al municipio de Tula Hidalgo, sin prever que su decisión representaría una de las más grandes tragedias de los últimos años en el estado.
El desfogue de las presas provocó muertes, pérdidas materiales para las familias del estado y dejó una lección clara: no hay casualidades. Cuando se toman pésimas decisiones, nada bueno se puede esperar.
Queridos lectores, mi sentencia es firme: Tula no se inundó, a Tula la inundaron.
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Columna de Francisco Hermann.
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